Luis Antonio Tagle, considerado uno de los principales candidatos al papado, protagonizó un momento inesperado al interpretar una canción en público. El gesto, captado en video, generó sorpresa y críticas entre fieles por el mensaje de la letra.
Tras la muerte del papa Francisco, el mundo entero tiene los ojos fijos en el Vaticano esperando la fumata blanca que anunciará que la iglesia católica tendrá un nuevo líder. Los principales candidatos a sucederlo han pasado a estar bajo los focos y han abandonado el relativo anonimato de medios del que suelen gozar las figuras eclesiásticas.

En este contexto, uno de los favoritos en las apuestas por quién podría suceder al papa Francisco ha llamado la atención de las redes con un video que lo muestra cantando públicamente. La elección de una canción, muy conocida pero quizás poco apropiada para un sacerdote por su letra, ha causado alarma a muchos feligreses en las redes. Brindaremos aquí algo de contexto y podrás ver el video más adelante.
La sucesión
El fallecimiento del papa Francisco ha marcado el inicio de un periodo de transición crucial para la Iglesia Católica. Tras doce años de pontificado, el papa argentino dejó un legado que ahora será evaluado por los cardenales reunidos en el Vaticano. El próximo líder espiritual deberá lidiar con una institución global en transformación, afectada por escándalos, cambios culturales y desafíos sociales que afectan a millones de fieles en todo el mundo.

Con la muerte del pontífice, la atención se dirige al cónclave, un proceso reservado exclusivamente para los cardenales menores de 80 años. Esta votación secreta, que se lleva a cabo dentro de la Capilla Sixtina, ha despertado un gran interés público. El inicio del cónclave está previsto para el 7 de mayo. En esa fecha, los cardenales quedarán incomunicados hasta alcanzar un consenso sobre quién será el nuevo papa.
La muerte de Francisco fue anunciada el 21 de abril. Dos días después, el Vaticano confirmó que el cónclave comenzará el 7 de mayo, cumpliendo con el plazo canónico de entre 15 y 20 días tras el fallecimiento de un papa. Un total de 135 cardenales menores de 80 años están habilitados para votar. De ellos, 108 fueron designados por el mismo Francisco. Cada uno ha jurado guardar secreto absoluto sobre el proceso. Cualquier violación a esta norma resulta en excomunión automática.

El primer día del cónclave incluye una misa en la Basílica de San Pedro. Luego, los cardenales ingresan a la Capilla Sixtina, donde se inicia la votación. La elección requiere una mayoría de dos tercios más uno. El voto es anónimo, depositado en una urna ceremonial tras ser escrito a mano.
Si no se alcanza un acuerdo, los votos se queman produciendo humo negro. En cambio, si hay consenso, el humo es blanco y se hace sonar una campana, señalando al mundo que ya hay nuevo papa. El elegido acepta con la palabra “Accepto” en latín y aparece en el balcón principal del Vaticano para dar su primera bendición.
Los favoritos al papado: Parolin y Tagle
Pietro Parolin, de 70 años, es el secretario de Estado del Vaticano. Fue nombrado cardenal por Francisco y ha estado al frente de temas delicados como la relación con China. Tiene un perfil diplomático y es considerado un hombre de consenso. Aunque cercano a Francisco, es más reservado y algo más conservador en temas como el matrimonio igualitario.