En una conmovedora muestra de apoyo, una familia en Ontario, Canadá, celebró una fiesta de revelación de género para su hija de ocho años, Ella Scott. Esta celebración se produjo después de que Ella, quien vivía como un niño, les dijera a sus padres hace dos años que no se sentía como un niño.Los padres de Ella, Nikki y Graham Scott, inicialmente pensaron que su hija podría estar pasando por una etapa. Nikki, de 38 años, y Graham, de 39, notaron desde el principio que Ella era diferente a sus hermanos, y prefería jugar con niñas y juguetes de Frozen. Nikki pensó: “Con Ella, era como si siempre supiera quién era, pero nosotros simplemente no la entendíamos”.
El camino de Ella dio un giro decisivo cuando cumplió seis años y expresó su deseo de usar faldas y vestidos. A pesar de las dudas iniciales, Nikki y Graham decidieron dejar que Ella eligiera su disfraz de Halloween ese año, y ella eligió una falda con orejas de gato. Esta experiencia impulsó a sus padres a informarse y a informar a Ella sobre temas transgénero. Al final, Ella afirmó claramente: “No soy un niño, no me siento así por dentro”.