Una figura célebre de la época dorada de Hollywood fue vista recientemente realizando tareas rutinarias de jardinería en su casa de Los Ángeles, demostrando que su encanto atemporal persiste. Reconocida por sus diversos talentos como vocalista, actriz y bailarina, esta icónica artista transformó una simple tarea al aire libre en una escena cautivadora.
Esta octogenaria, que comenzó su carrera actoral siendo preadolescente, ha forjado una carrera variada que abarca la televisión, el cine y la actuación en vivo. Comenzó su carrera apareciendo en espectáculos de variedades, entreteniendo a las tropas en las giras de la USO con Bob Hope y consiguiendo papeles en numerosas películas de Hollywood. Su presencia escénica también fue notable, compartiendo protagonismo con Jane Fonda en la producción de Broadway de 1960 “There Was A Little Girl”, una actuación que la catapultó a la fama. Su dedicación y carisma finalmente le valieron una nominación al Globo de Oro, testimonio de su encanto imperecedero.
Heatherton alcanzó un amplio reconocimiento gracias a sus papeles en películas como “My Blood Runs Cold” (1965) y “The Happy Hooker Goes to Washington” (1977). Su carrera dio un giro significativo en 1964 cuando fue nominada a Nueva Estrella del Año – Actriz en los Globos de Oro por su actuación en “Twilight of Horror”, junto a Richard Chamberlain. Además de su carrera como actriz, también causó sensación en la industria musical con el lanzamiento de “The Joey Heatherton Album” en 1972 y se convirtió en un rostro familiar en anuncios de televisión, promocionando marcas como Serta Mattresses y RC Cola.
Criada en el mundo del entretenimiento como hija de la estrella de Broadway y personalidad televisiva Ray Heatherton, Joey se consolidó rápidamente en el mundo del espectáculo. Su carrera incluyó numerosas apariciones en destacados programas de entrevistas, como “The Tonight Show” y “The Dean Martin Show”. En 1975, incluso copresentó un programa de variedades de cuatro semanas con su padre, titulado “Joey & Dad”. Su energía vibrante y su innegable talento la convirtieron en una artista muy solicitada, especialmente durante las décadas de 1960 y 1970.
Aunque Heatherton se retiró del ojo público en sus últimos años, su influencia sigue siendo significativa. Su último papel importante como actriz fue en la película de 1990 de Johnny Depp, “Cry-Baby”. Su vida personal incluyó un breve matrimonio con el receptor abierto de los Dallas Cowboys, Lance Rentzel, y algunos desafíos legales, en particular un incidente en 1986 con un empleado de pasaportes. Sin embargo, a pesar de todos los altibajos, el legado de Joey Heatherton como artista cautivadora y un verdadero ícono de su época sigue vigente.