Gene Hackman, el legendario actor cuya carrera abarcó seis décadas, fue encontrado muerto junto a su esposa, Betsy Arakawa, en su casa de Santa Fe. Nacido en 1930, Hackman se convirtió en un ícono de Hollywood con actuaciones inolvidables en películas como The French Connection y Los imperdonables, que le valieron dos premios Óscar. A pesar de su éxito profesional, su vida personal estuvo marcada por desafíos, incluyendo la temprana partida de su padre y el eventual divorcio de su primera esposa. Sin embargo, encontró la felicidad duradera con Arakawa, con quien se casó en 1991.
El camino de Hackman hacia el estrellato no fue nada fácil. Su padre lo abandonó cuando era niño y, tras abandonar la universidad, luchó por consolidarse como actor. Al mudarse a Nueva York, realizó diversos trabajos esporádicos antes de finalmente alcanzar la fama en Hollywood. Su primer matrimonio, con Faye Maltese, dio como resultado tres hijos, pero terminó en divorcio, en gran parte debido a las presiones de su exigente carrera. Hackman admitió más tarde que su trabajo a menudo afectaba su vida familiar, en particular la relación con su hijo.
En contraste, su segundo matrimonio con la pianista clásica Betsy Arakawa le brindó una sensación de estabilidad y plenitud. Se conocieron en la década de 1980 en un gimnasio y forjaron una profunda conexión a pesar de la gran diferencia de edad. Hackman a menudo atribuía a Arakawa una influencia positiva en su vida. Tras retirarse de la actuación en 2004, la pareja se estableció en Santa Fe, donde Hackman se dedicó a aficiones como la pintura y la jardinería. Lejos de los focos, abrazó una vida más tranquila y pacífica.
La decisión de Hackman de alejarse de Hollywood estuvo influenciada por motivos personales y de salud. Si bien extrañaba la actuación, el aspecto comercial de la industria le resultaba cada vez más estresante. Además, una afección cardíaca le hizo reevaluar sus prioridades, lo que lo llevó a centrarse en su bienestar. Tras su jubilación, mantuvo una vida privada, rara vez aparecía en público. Sin embargo, verlo ocasionalmente haciendo recados o trabajando en el jardín despertaba curiosidad y admiración, mientras sus fans se maravillaban de su edad.