Hoy en día, la mayoría de las personas usan las redes sociales como su principal medio de comunicación. Es costumbre enviar fotos de sus hijos a amigos y familiares para que las disfruten.
Al igual que otras madres jóvenes, publica en redes sociales, pero los comentarios en sus imágenes y el trato que reciben son radicalmente diferentes. Sin embargo, tiene algunas observaciones que hacer…
La joven madre Natasha se está adaptando a la crianza. Disfruta publicando fotos de su hijo Raedyn, de un año, en línea, como muchas otras madres primerizas. Pero, a diferencia de la mayoría de las madres, sufre un grave acoso en internet debido al aspecto de su hijo.

En la conocida red social TikTok, sube videos de ella y su hijo Raedyn. También recibe decenas, si no cientos, de comentarios que le piden que deje de subir imágenes o videos de su bebé.
Pero Natasha tiene un mensaje para quienes no la aprecian: “No voy a parar… que se vea diferente no significa que sea menos; es perfecto”, dice.
No puede contar la cantidad de mensajes o comentarios que recibe que dicen: “¿Qué le pasa a tu hijo? ¿Por qué se ve así?”.

Raedyn, un niño pequeño, nació con el síndrome de Pfeiffer, que provoca deformidades en las extremidades, la cara y el cráneo. Natasha, sin embargo, cree que su hijo es perfecto, así que siempre que tiene oportunidad, sube videos de él a internet.
Sin embargo, señala que la mayoría de los comentarios que recibe son hirientes, y suelen decir cosas como: “¿Qué calidad de vida tendrá?”, preguntó alguien con rudeza en TikTok, mientras que otra persona añadió: “¿Por qué lo obligas a vivir así? Le estás permitiendo vivir una vida tan miserable”.